lunes, 9 de noviembre de 2009

Obrigado, thank you, pero sobre todo, ¡gracias hondureños!


El Subsecretario de Asuntos Hemisféricos del Departamento de Estado Tom Shannon dio el último toque de horno a una restitución que nunca hubiera ocurrido sin la presión inédita que ejerció un Brasil decididísimo y (no lo olvidemos, contagiados de amnesia periodística) la movilización del pueblo hondureño.

Mel Zelaya vuelve, tal vez sólo para cumplir un rol ceremonial hasta el final de su mandato en enero del año que viene. Sin embargo, ello no debe dejarnos con gusto a poco: fue derrotado un golpe, quedó establecida la autoridad hemisférica de un poder que lentamente empieza a equilibrar el predominio estadounidense en la región y la OEA conducida por Panzer Insulza, la UNASUR, el MERCOSUR, el Grupo de Rio y todas las instancias multilaterales conducidas por latinoamericanos impusieron condiciones en las que los EE.UU. tuvieron que jugar un rol ineludiblemente benévolo.

El movimiento popular hondureño, incipiente al inicio de esta crisis, puede haber tenido el bautismo de fuego que lo ayude a dar un salto de calidad y hasta la próxima salida de escena de Zelaya puede terminar siendo una bendición disfrazada que decida el futuro de la construcción de un poder popular.

Era cierto, Morazán vigilaba.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno el post, puricelli. Intentaré hacerme un tiempito durante el fin de semana para investigar un poco más tu blog. Saludos cordiales, olivia cuatrocincos.

Mauri Kurcbard dijo...

Si, totalmente, coincido. Mas alla de Zelaya, se abre un escenario muy bueno para las fuerzas populares y democraticas en Honduras, que sumado a los procesos en El Salvador y Nicaragua conforman un antes y despues. Es un clara derrota de la Dictadura y un clarisimo triunfo popular.
Ahora hablara la Historia.

Unknown dijo...

Compañero, ha logrado hacerme cambiar de parecer, Zelaya es apenas un nombre, un hoimbre en comparación de lo que ha conseguido, y como bien dice Mauri, puede conseguir de ahora en más, el pueblo hondureño.

Me agendo su blog en el mío, ahora lo chusmeo.

Marmaduke/Eddie/Matt dijo...

Lamentablemente la Administración Obama ha dado un paso claudicante después de este post y ha cedido a la presión de un senador republicano -Jim DeMint (R-South Carolina)- para aceptar los resultados de las inminentes elecciones en Honduras aunque Zelaya no fuera repuesto (y no lo fue).
El Presidente se vio obligado a pactar con DeMint porque éste estaba bloqueando la designación de Arturo Valenzuela como nuevo Subsecretario de Estado para América Latina, nombramiento que requiere acuerdo del Senado. Ese sector de la política exterior norteamericana seguía totalmente en manos del equipo que lo manejaba durante la Administración Bush, encabezado por Tom Shannon.
"Yo te doy Honduras, tu me das Valenzuela", es lo que aceptó el Presidente. Esperemos que funcione y que el movimiento popular hondureño siga adelante a pesar de esta "agachada" de la actual Administración.